Pararrayos
Estas descargas pueden generar potencias instantáneas de hasta 1 gigawatio (mil millones de vatios), pudiendo ser comparable a la de una explosión nuclear, lo que las convierte en uno de los fenómenos naturales más destructivos de la naturaleza.
Se hace necesario por tanto, la instalación de sistemas de protección contra el rayo para edificios y personas.
Estos sistemas tienen que ser capaces de:
- Capturar el rayo
- Conducir la corriente de rayo de forma segura a tierra.
- Disipar la corriente de rayo en tierra.
- Proteger contra los efectos secundarios del rayo.
Los elementos de un Sistema de Protección contra el Rayo mediante PDC son los siguientes:
- Uno o más cabezales captadores.
- Dos o más conductores de bajada.
- Un sistema de toma de tierra
Una instalación de protección contra el rayo, si además hay que realizarla en edificios singulares, emblemáticos o protegidos por las leyes urbanísticas, siempre se ha de realizar con el máximo cuidado y sensibilidad.
Se tiene que buscar una solución que equilibre la funcionalidad, la estética y las normativas vigentes.
Cuando un rayo impacta y se descarga a tierra, siempre se crea una zona de afectación en la que las instalaciones eléctricas reciben una subida de tensión o sobretensión.
Para evitar estos efectos dañinos, las instalaciones se pueden completar colocando internamente protecciones contra sobretensiones, adecuadas para minimizar los efectos destructivos del rayo en cualquier aparato eléctrico.
Todo el material instalado por 2001 técnica y artesanía cumple con las normas del Código Técnico de Edificación CTE SU 8, UNE 21186 y NFC 17102.
